El pasado mes de junio finalizó el programa formativo “Gestión de Negocios y Factores Ambientales, Sociales y de Gobernanza (ASG)”, fruto de la asociación entre la Fundación Konrad Adenauer con la organización panameña Sumarse, el cual estuvo dirigido a empresas panameñas interesadas en pautar y promover el respeto y la remediación de la sostenibilidad y los derechos humanos, tanto en su desarrollo empresarial como con sus grupos de interés.
Este curso, iniciado en diciembre de 2021, con modalidad 100% en línea, estuvo compuesto por sesiones formativas, talleres prácticos y sesiones de mentoría en donde se les planteó a los participantes el contexto de las finanzas sostenibles en Panamá, la transparencia de la información en la gestión ASG desde el punto de vista del cambio climático, la diversidad en la empresa y la ética en el gobierno corporativo, entre otros temas.
A este programa formativo asistieron 20 mujeres y 7 hombres de las siguientes 9 empresas nacionales: Autoridad del Canal de Panamá, Banco Nacional de Panamá, Banesco, Caja de Ahorros, Fontus Hydro, Global Bank, Mercantil Servicios Financieros, Promed y Toledano.
“Cada vez más las normativas internacionales y regulaciones comerciales con Europa mueven a las empresas a tomar en cuenta los derechos humanos, los procesos de la debida diligencia y los criterios ambientales en su estrategia de negocio y cadena de valor”, asegura Winfried Weck, representante país de la Fundación Konrad Adenauer en Panamá.
A modo de contexto, Klais Schwab, fundador y presidente ejecutivo del Foro Económico Mundial, ha señalado que “las empresas ahora deben adoptar plenamente el capitalismo de los grupos de interés, lo que significa no solo maximizar las ganancias, sino también utilizar sus capacidades y recursos en cooperación con los gobiernos y la sociedad civil para abordar los problemas clave de esta década, por lo que tienen que contribuir activamente a un mundo más coherente y sostenible”.
Por su parte, Yanny Afre, especialista en Desarrollo Empresarial de Sumarse, agregó que “este programa será de gran valor para motivar a más empresas panameñas a integrar sus riesgos ASG, a ser más transparentes y a cumplir con las normativas de reporte con la Unión Europea y otros organismos internacionales. Las empresas participantes construyeron una hoja de ruta de su estrategia con la integración de los criterios ASG, para los próximos meses”.
Uno de los aprendizajes de esta experiencia formativa recayó en el concepto de la doble materialidad, en el que las empresas mapean sus grupos de interés y los impactos que sus operaciones tienen en los ámbitos económicos, sociales y ambientales; al mismo tiempo se pudo establecer la necesidad de gestionar los impactos de los factores ASG a la rentabilidad y valor del negocio.