La economía global ha experimentado cambios importantes que se profundizaron en los últimos dos años derivado de la crisis sanitaria, el confinamiento y los paros de producción ocasionados por la pandemia del COVID-19. El comercio global incluso se volvió menos dinámico desde la segunda mitad de la década pasada. Estos cambios han ocasionado una tendencia emergente en los patrones de producción global y una reconfiguración en la operación y la ubicación de las cadenas productivas.
Esta coyuntura se presenta como una oportunidad para la región Centro-Bajío en lo que respecta a su contribución a la integración de valor agregado en las cadenas de producción global y los factores y condiciones que subyacen a este proceso. En el presente análisis se consideran los estados de Aguascalientes, Guanajuato, Querétaro, Jalisco y San Luis Potosí en la definición de la región Centro-Bajío. La región es importante en varias dimensiones, ya que concentra 16.6% de la población del país y genera 15.8% de la riqueza nacional, con base en su aportación al producto interno bruto (PIB). Asimismo, el ingreso per cápita de la región ascendió a 132,079 pesos por habitante en 2020, lo que es muy similar a lo registrado para la economía mexicana con 132,981 pesos por habitante.
La apertura comercial de México desde mediados de los ochenta del siglo pasado ha tenido un papel decisivo para el crecimiento y desarrollo industrial del Centro-Bajío. La región contribuyo en 2021 con una quinta parte de las exportaciones del país en giros como la producción de automóviles; equipo de computación, comunicación y componentes electrónicos; productos químicos, plásticos e industria alimentaria, por mencionar algunos.
Las cadenas de valor del Centro-Bajío se complementan en gran medida mediante la vocación y la especialización productiva de cada estado; competencias técnicas; presencia de empresas con operaciones multinacionales que funcionan como empresas integradoras; infraestructura para la investigación y el desarrollo de los centros de educación superior; así como una infraestructura de comunicaciones bien desarrollada y buena conectividad entre una serie de parques industriales.
Este documento tiene por objeto ofrecer un panorama respecto a las fortalezas y áreas de oportunidad de la región Centro-Bajío en asignaturas sobre su vocación productiva, atracción de inversiones, intercambio comercial y diversificación, sectores con potencial de desarrollo y, de manera particular, la revisión de una serie de condiciones necesarias para una conformación más resuelta de las cadenas de proveeduría y su contribución en la generación de valor agregado.