Los talleres estaban dirigidos a quince líderes y lideresas sociales, cercanos a las comunidades afro establecidas en Bogotá. El propósito de estas jornadas era dictar una serie de actividades de formación en técnicas para tener una mayor comprensión sobre cómo incidir en el diseño de las políticas públicas. Dichos lineamientos son entendidos como una parte fundamental y protagónica de la construcción de un tejido social heterogéneo.
Entre las metas establecidas, se encontraba que las y los participantes de este ciclo de talleres, participaran también en los Diálogos Regionales Vinculantes propuestos por el Gobierno Nacional y que su participación fuera más acertada en pro de sus comunidades. Por lo tanto, se recordó que los Diálogos Regiones Vinculantes tienen como fin involucrar a toda la ciudadanía en la elaboración del Plan Nacional de Desarrollo de cara al proyecto de “Colombia, Potencia Mundial de la Vida”. Cabe destacar que el PND es la hoja de ruta establecida para fijar programas, presupuestos, auditorias y metas para los próximos cuatro años, tanto a nivel territorial como nacional.
La primera jornada tenía como meta concientizar a los participantes sobre los elementos básicos, los mecanismos de intervención y el funcionamiento de la política pública en Colombia. Asimismo, se manifestaron las limitaciones y desencantos en la aplicación de las mismas frente a la población afrodescendiente establecida en la capital. Se hizo hincapié en las estrategias para comunicarse con las autoridades y entidades que tienen grados de decisión en la ejecución del PND, con el objetivo de priorizar el ordenamiento territorial de cara a la “paz total”, en el desarrollo de una economía productiva para el cambio climático, la seguridad humana, la justicia, la convergencia regional y el derecho humano a la alimentación.
Para finalizar estas sesiones, los asistentes se interesaron en adquirir conocimientos para proponer soluciones para incrementar la empleabilidad en esta población, acciones para combatir el racismo, la implementación obligatoria de una cátedra afrocolombiana y la implementación real del capítulo étnico del Acuerdo de Paz del 2016.