Este premio, liderado por la Corporación Emprender Paz y la Fundación Grupo Social, se realiza en alianza con la Konrad Adenauer Stiftung (KAS), la Embajada de Suecia en Colombia y Ayuda en Acción. En esta edición, fueron exaltados once proyectos que demuestran cómo el sector privado puede ser un actor clave en la transformación social y la reconciliación en el país.
La ceremonia comenzó con una muestra musical de la iniciativa finalista Marimbea, seguida por la bienvenida de Inés María Zabaraín, periodista y presentadora. A continuación, Helena Storm, embajadora de Suecia en Colombia, agradeció a las 127 iniciativas postuladas y destacó el compromiso empresarial con el desarrollo sostenible y la paz. Además, celebró los 150 años de relaciones diplomáticas entre Suecia y Colombia y expresó la satisfacción de su país por apoyar el premio durante 15 años consecutivos.
Stefan Reith, director de la KAS en Colombia, subrayó la importancia de fomentar la solidaridad, la inclusión y el empleo digno como pilares para una paz duradera. Recordó el legado de Konrad Adenauer como promotor de la democracia y la reconciliación, resaltando que los finalistas representan una semilla de esperanza para equilibrar el desarrollo económico, social y ambiental.
Por su parte, María Isabel Cerón, directora de Ayuda en Acción en Colombia, destacó los más de 40 años de la fundación promoviendo el desarrollo en comunidades vulnerables. Desde 2006, han empoderado a mujeres y jóvenes rurales para avanzar hacia un desarrollo sostenible. Cerón concluyó afirmando que estas iniciativas demuestran cómo la paz se construye cada día, con innovación, compromiso y acciones concretas.
El presidente de la Fundación Grupo Social, Juan Carlos Gómez, expresó un profundo agradecimiento a los finalistas y aliados. En sus palabras, destacó los 17 años del premio, exaltando a las empresas que contribuyen a la construcción de paz a través de actividades productivas, las cuales logran transformaciones concretas en el tejido social del país. Gómez enfatizó que estas empresas no solo generan utilidades, sino que también son agentes clave en la construcción de comunidad. Finalmente, afirmó que es fundamental dar visibilidad a los finalistas y ganadores, para fomentar más iniciativas que trabajen por el desarrollo y la cohesión social.
Iniciativas Reconocidas
El Premio Emprender Paz 2024 reconoció 11 iniciativas privadas que promueven la transformación de comunidades afectadas por el conflicto mediante estrategias de inclusión y sostenibilidad. Entre ellas, Coagropacífico procesa estopa de coco, reduciendo la contaminación de ríos y mejorando los ingresos de sus asociados. Bufalabella SAS, con su marca Dibufala, apoya a pequeños productores de leche de búfala en zonas rurales vulnerables, mientras que Caryo – Wild Cacay Project fomenta economías forestales sostenibles al desarrollar proveedores de nuez de cacay en Guaviare y Caquetá. Surikí Nature, fundada por desplazados retornados, ofrece servicios agroecológicos y de turismo regenerativo que restauran el medio ambiente y fortalecen economías locales. Marimbea visibiliza prácticas culturales ancestrales del Pacífico colombiano a través del turismo comunitario en Nariño y Cauca.
En el ámbito de servicios básicos y dignificación laboral, la Fundación Tierra Grata brinda acceso a energía solar a comunidades rurales en La Guajira, beneficiando a 3.500 personas. Empacor, a través de la fabricación de cajas de cartón, mejora la calidad de vida de los recicladores de oficio, dignifica su labor y elimina el trabajo infantil en zonas urbanas. Ekofil ha desarrollado una solución innovadora para el acceso al agua potable en comunidades vulnerables, beneficiando a más de 500,000 personas mediante una tecnología que no requiere energía eléctrica. Davivienda, con su iniciativa Ecosistema Agropecuario, combina financiación, asistencia técnica y aseguramiento para mejorar las condiciones de vida de productores agrícolas en Colombia.
Por último, Manifiesta, una empresa social textil, genera oportunidades laborales para excombatientes y víctimas del conflicto armado en Caquetá, Tolima y Cundinamarca, promoviendo la reintegración social y económica. La Asociación Redefrío, en Bahía Solano, impulsa prácticas sostenibles de pesca artesanal y facilita la comercialización directa, mejorando los ingresos de sus asociados. Estas empresas ejemplifican cómo el sector privado puede ser un motor de desarrollo, promoviendo transformaciones económicas, sociales y ambientales en territorios históricamente afectados por la violencia y el abandono.
Los ganadores de esta edición fueron: Marimbea en el cuarto lugar, Caryo en el tercero, Redefrío en el segundo, y Ekofil en el primer puesto.
El Premio Emprender Paz ha logrado sensibilizar cada vez más a individuos, comunidades y empresas sobre las dinámicas territoriales y los desafíos que enfrentan los proyectos de responsabilidad social en Colombia. Este evento demuestra que, a pesar de las adversidades, es posible generar un impacto positivo a través de acciones concretas, sumadas a una cultura empresarial que promueva valores fundamentales como la comunidad, la sostenibilidad y la inclusión.
El premio se erige también como una ventana que ilustra cómo, con creatividad, esfuerzo y pasión, las empresas pueden transformar su entorno, fomentar una cultura de trabajo digno y generar oportunidades para la movilidad social. De esta manera, se reafirma el poder del sector privado como motor de cambio, capaz de contribuir al desarrollo de un país más justo y equitativo.
